*** En total, 230 niñas, niños y adolescentes se unieron a esta celebración deportiva. ***
El complejo deportivo Carlos Maya se convirtió en el epicentro de la inclusión y la diversión durante los días 8, 9 y 10 de abril, al albergar la edición 18 del Festival Deportivo y Recreativo de las Escuelas de Educación Especial del municipio Alberto Adriani.
Este evento, que reúne a niños, padres y profesores, contó con el apoyo de la Gobernación de Mérida, a través de la Fundación Regional “El Niño Simón”, dando cumplimiento a las políticas en materia de inclusión que orienta el Gobierno nacional.
En esta edición, la número 18 del festival, seis escuelas de educación especial del municipio Alberto Adriani participan activamente, junto con la Escuela de Educación Especial de Tucaní, del municipio Caracciolo Parra. En total, 230 niñas, niños y adolescentes se unieron a esta celebración deportiva.
Las actividades son diversas y están llenas de alegría. Desde evaluaciones terapéuticas hasta caminatas con padres, representantes y alumnos. Cada rincón del complejo vibra con risas y entusiasmo. Los profesores también se sumaron a la diversión, participando en intercambios con atletas de la selección paralímpica del estado Mérida, en sillas de ruedas.
“Fue un momento único donde los docentes vivieron la experiencia de utilizar sillas de ruedas, conociendo así las dificultades que enfrentan a diario nuestros estudiantes”, comentó el director del complejo deportivo Carlos Maya, Víctor Paredes.
El festival no sólo se trata del deporte, pues se llevan a cabo juegos recreativos como ajedrez para niños con discapacidad intelectual y dominó para personas invidentes.
“Queremos agradecer a todos los padres que continúan haciendo de las escuelas de educación especial un lugar maravilloso. Este evento es una muestra clara de nuestro compromiso por fortalecer estas actividades inclusivas”, resaltó Paredes, quien agradeció a la actual gestión de la Fundación Regional “El Niño Simón”, y a su presidenta Gayrimar Cano de Guzmán, por el apoyo para este evento.
Con un espíritu de camaradería y solidaridad, el festival deportivo y recreativo deja una huella imborrable en todos los participantes. “Esperamos que el próximo año podamos seguir fortaleciendo este tipo de actividades”, concluyó Paredes.
Este festival no solo celebró el deporte, sino que también promovió la inclusión y el respeto hacia la diversidad. Sin duda, una semana que los asistentes recordarán con alegría y emoción. /Prensa Gobernación de Mérida / Johan Contreras / ASFT /Fotos: OCI