Es irresponsable que los sindicalistas de oficio, movidos por un interés político, partidista y electoral, utilicen a los obreros o empleados sindicalizados para crear falsas matrices de opinión que no se corresponden con la realidad económica del país ni del estado, así lo refirió el dirigente sindical Pedro Pablo Paredes, miembro del sindicato de Hospitales y Clínicas, cuando expresó su opinión referente a la movilización que realizaron algunos obreros dependientes de la Gobernación del estado Mérida, haciendo un reclamo justo, pero con tintes dañinos.
Paredes aseguró que “estamos conscientes de que la gobernación tiene una deuda correspondiente al aumento del mes de marzo y el mes de abril, es un planteamiento que hemos venido haciendo a la gobernación. También sabemos que a nivel nacional firman una contratación, unas actas convenio, las cuales deben ser extensivas a las gobernaciones y, lamentablemente, desde el ente central no han enviado los recursos correspondientes para honrar esos pagos”.
Patrón receptivo
El dirigente sindical afirmó que “hemos tenido la buena receptividad de parte de la gobernación, donde nos hemos reunido tanto con el gobernador como con el director de recursos humanos, quienes han sido muy receptivos y nos han explicado —con lujo de detalles— todas las realidades a los planteamientos que nosotros hemos hecho como sindicato”.
Refirió que las conversaciones, a lo largo de la gestión de Ramón Guevara, se han caracterizado por el respeto y la cordialidad con todos los gremios, lo cual agradecen. “Estamos conscientes de su buena voluntad, pero si desde el ente central no envían los recursos, es imposible que la gobernación pueda pagar”, indicó Paredes.
Paredes hizo un recuento de su dilatada trayectoria dentro del parlamento regional y aseguró que conoce muy bien los lapsos y las formas legales, recordó que los presupuestos se aprueban a final de cada año, “y estos son aumentos que se han hecho en el año 2021, mal podemos pedir que con el presupuesto ordinario de la gobernación se nos pague una deuda acordada por el Gobierno nacional sin que esta esté presupuestada, por lo que se debe pagar con créditos adicionales que el mismo ente central no ha mandado”.
El sindicalista asumió un profundo respeto por la acción gremial en defensa de los trabajadores y obreros, pero aseguró que la forma es equivocada, pues todos los dirigentes sindicales en Mérida están al tanto de la realidad económica por la que atraviesa el Ejecutivo regional.
“Respeto la posición de la colega sindicalista, cada cual tiene su forma de actuar, pero, actualmente, no hay razones para este tipo de protestas, porque creo y estoy seguro de que los dirigentes sindicales de esos sindicatos también están conscientes que a la gobernación no le han llegado los recursos, pero esa es su posición que es respetable”, exclamó.
Finalizó Paredes dando un voto de confianza a la gestión del gobernador Guevara y a las faenas emprendidas por el director de recursos humanos, Antonio Díaz, “esperamos que las noticias que traigan de la capital sean beneficiosas y abogamos porque los reclamos se hagan ante el ente responsable para evitar contaminaciones políticas en estos tiempos electorales”. /Euro Lobo