La pugna entre el Gobierno de Sebastián Piñera y la oposición en Chile por la reducción de la jornada laboral, de 45 a 40 horas semanales, sigue agudizándose este miércoles 4 de septiembre y apunta a dirimirse en el Tribunal Constitucional (TC)
Sin embargo, el oficialismo, en su afán por no admitir el proyecto, anunció que recurrirá al TC para impugnarlo, tal como habÃa amenazado.
En respuesta a la amenaza del oficialismo, el partido opositor que respalda el proyecto escogió al abogado constitucional Patricio Zapata, para asumir la defensa de la iniciativa ante ese órgano.
Por su parte, el presidente Sebastián Piñera también anunció que apelará a todos los recursos a su alcance para impedir que la propuesta de las 40 horas se convierta en ley.
La iniciativa de reducción laboral –impulsada por la diputada comunista Camila Vallejo– afirma que el actual régimen laboral chileno “no permite a los trabajadores desarrollar una vida familiar o disponer de tiempo libre para educarse o entretenerse”.
La propuesta ha recibido varias crÃticas del Gobierno chileno y también de los sectores empresariales, que se quejan de que no se está considerando responsablemente todos los efectos que esta medida podrÃa tener sobre los trabajadores que laboran con horarios flexibles y los que tienen renta variable.
El presidente Sebastián Piñera ya habÃa señalado anteriormente que este proyecto “es inconstitucional porque significa gasto público”. Según el mandatario, un parlamentario “no puede generar gasto público, porque entonces nadie se harÃa cargo de los equilibrios”.
El Gobierno también trabaja para impulsar su propio proyecto que reduce la jornada laboral de 45 a 41 horas promedio semanales como máximo, teniendo como eje la flexibilidad de horario y permitiendo al trabajador acordar cómo puede distribuir sus horas.
Reuters