Este
lunes 18 de abril la cultura popular venezolana conmemora 19 años de la siembra
de Juan Félix Sánchez en 1997, agricultor merideño, cuyo prolÃfico aporte a la
talla, al tejido y a la escultura, le valió el apelativo de Gigante de El
Tisure, forma en la que el pueblo se refiere a una vida sencilla, amorosa,
ejemplar y compartida.
Nacido
el 16 de mayo de 1900, en San Rafael de MucuchÃes, estado Mérida, en la región
andina venezolana, Juan Félix destaca en la historia por la construcción de
monumentos religiosos que ensalzan la religiosidad, las tradiciones en los
páramos y ostentan la condición de Patrimonio Nacional, por decreto
presidencial dictado en 1982.
Su
condición de agricultor, de labriego, titiritero, mago popular, autodidacta,
artesano y comunero, siempre fue el pilar de su espÃritu humanista y preocupado
de la convivencia.
Desde
temprana edad se apartó de la escuela, para apoyar a sus padres en las faenas
de la agricultura. En 1925 ya dominaba el oficio de tejedor y participaba de
manera amplia en la vida comunitaria, dedicación que le llevó entre 1929 y
1933, a ejercer como presidente de la Junta Comunal, lo que no impidió que 1935
iniciara su obra escultórica, siempre asociada a la tradición cristiana.
Participó
en la reconstrucción de la Iglesia de San Rafael de MucuchÃes en 1941. En 1943
se muda a la apartada zona del páramo, conocida como El Tisure, donde forma
familia con EpifanÃa Gil, con quien comparte una vida sencilla y rica en
espiritualidad.
Por
más de 30 años, se dedicó a edificar una capilla para homenajear a la Virgen de
Coromoto, que hoy se conoce como Complejo religioso de El Tisure.
Entre
1980 y 1984 construyó con sus manos y con herramientas rudimentarias la capilla
de piedra en San Rafael de MucuchÃes, patrimonio nacional donde hoy reposan sus
restos y los de su compañera, EpifanÃa Gil.
AVN