Facultad de Farmacia y
Bioanálisis celebra
118 años formando e impactando en la sociedad
*** El 24 de octubre de 1894 fue promulgado,
por el rector Caracciolo Parra y Olmedo, el decreto de creación de la Facultad
de Farmacia de la Universidad de Los Andes, dependencia que adscribieron, en
ese momento, a la Facultad de Ciencias de la Salud.
La
comunidad universitaria que hace vida en la Facultad de Farmacia y Bioanálisis
de la Universidad de Los Andes, recordó este 24 de octubre la fecha en la cual
el “Rector Heroico”, doctor Caracciolo Parra y Olmedo, decretó su creación, con
lo que arriba, este dÃa, a 118 años de actividad académica ininterrumpida, que
bien fue descrita por el profesor Alfredo Usubillaga, quien tiene en su haber
cincuenta años de experiencia institucional.
La
celebración del 118 aniversario de la Facultad de Farmacia y Bioanálisis, se
inició con la celebración de la misa en acción de gracias, realizada en su
patio central. También en sus pasillos se observaron afiches contentivos de la
información de trabajos cientÃficos presentados en eventos nacionales e
internacionales en los cuales la Universidad de Los Andes ha logrado imponerse
gracias a la calidad de la investigación que desarrollan profesores,
investigadores y estudiantes de ese recinto universitario.
El
programa tiene previsto, para este 25 de octubre, la realización de unas
jornadas cientÃficas en el marco de la fecha fundacional de la Facultad de
Farmacia y Bioanálisis, actividad de extensión dedicada a presentar temas que
contemplan los resultados de los estudios en terapia fotodinámica láser para el
tratamiento del carcinoma basocelular; etnobotánica de los frailejones,
aspectos quÃmicos y medicinales; actualización clÃnica y de laboratorio de la
infección por el virus dengue y el sÃndrome metabólico en adultos y niños,
ponencia a ser dictadas por destacados investigadores formados y egresados en
la mencionada facultad.
Un
privilegiado cuarto lugar
El
actual decano de la Facultad de Farmacia y Bioanálisis de la ULA, profesor José
Rafael Luna, expresó, con orgullo, que la dependencia que dirige ocupa el
cuarto lugar fundacional en cuanto a la creación de dependencia universitarias,
y en estos 118 han logrado consolidar ambas carreras, asà como posicionar a los
profesionales de allà egresados en importantes fuentes de trabajo.
“Indudablemente
la Facultad de Farmacia y Bioanálisis no solo alcanza efectos a través del
servicio comunitario, también lo hace hacia la sociedad a través de los
trabajos de investigación que resuelven problemas del medio ambiente. Los
servicios de extensión como los análisis que se realizan en nuestros
laboratorios, nos permiten resolver problemas puntuales en áreas como la
inmunologÃa, micologÃa, microbiologÃa, fertilidad, entre otros, de donde se
genera investigación y se resuelven problemas de salud pública de manera
importante”.
Un
testigo de excepción
El
profesor Alfredo Usubillaga lleva cincuenta años trabajando en la Facultad de
Farmacia y Bioanálisis, en consecuencia, nadie como él conoce de manera directa
el crecimiento y la transformación sostenida de esta dependencia. Comentó el
profesor, que su ingreso a la ULA fue el primero de febrero de 1962, por lo que
en el 2012 cumplió cincuenta años de actividad en la institución, de los cuales
-los últimos 25 años- ha prestado sus servicios en calidad de jubilado. “He
sido un jubilado activo pero sin sueldo, cuento nada más con mi jubilación, no
he percibido ningún estÃmulo monetario adicional por continuar trabajando tanto
en la docencia de postgrado como en la investigación de productos naturales”.
Muchas
fueron las anécdotas contadas por el investigador quien durante los últimos
cincuenta años ha vivido en la ciudad de Mérida, por lo que señala con
propiedad que es un testigo de la transformación de la Facultad de Farmacia y
Bioanálsis de la ULA y recuerda, con claridad, que cuando ingresó a la
institución era muy poco lo que se hacÃa en investigación, pues habÃan pocos
instrumentos para trabajar. “Todo se fue transformando, al principio gracias a
la visión de un gran rector como lo fue el doctor Pedro Rincón Gutiérrez, quien
dio un apoyo muy especial al Instituto de Investigaciones, fue él quien compró
los primeros instrumentos modernos que tuvimos, como un infrarrojo, un aparato
de resonancia protónica, ello permitió modernizar el tipo de investigación que
se realizaba en este instituto y en la Facultad de Farmacia”.
El
profesor Usubillaga recordó también que en 1982 fue inaugurado el primer
postgrado de la Facultad de Farmacia y Bioanálisis, especÃficamente el de los
estudios en QuÃmica de los Alimentos. “Este posgrado fue como una inyección de
energÃa a la investigación en nuestra facultad, porque permitió que muchos
profesores realizaran investigación dentro de las diferentes áreas de Farmacia”.
Explicó
que, en su caso, desde hace cincuenta años al dÃa de hoy, son muchas las
diferencias generadas por el mundo y la humanidad cambiante. “El
profesional de Farmacia ha mejorado su formación, pero también han mejorado su
formación profesional los quÃmicos y los ingenieros quÃmicos, es decir, la
competitividad es un mecanismo de continuo desarrollo, uno solo no se ha
desarrollado, los otros también lo han hecho y eso es bueno, ya que uno tiene
que continuamente hacer un esfuerzo por superarse y estar a la altura de las
circunstancias”.
Por
supuesto que la recomendación del experto no habrÃa de faltar en el aniversario
118 de la Facultad de Farmacia y Bioanálisis, es por ello que dejó un mensaje a
los estudiantes utilizando las mismas palabras y con el mismo énfasis que lo
hizo su abuela hace más de setenta años: “Estudie, ese es el futuro que lo va a
sacar a usted de abajo”.
El
profesor Alfredo Usubillaga, tras haber recorrido cincuenta años, de los 118
que lleva fundada la Facultad de Farmacia y Bioanálisis, se considera un hombre
feliz, pues logró ser tutor de muchas de investigaciones que le permitieron
aprender y superarse ante los problemas planteados por los estudiantes. “La
facultad tiene que continuar hacia adelante y mantenerse actualizada. No
debemos aislarnos del mundo, por el contrario, debemos estar en continuo
contacto, porque si nos encerramos nos quedaremos muy atrás”, dijo para
concluir.
(Yasmira
Carrasquero. CNP 12405. Prensa ULA)